La división de Búsqueda de Personas de la Dirección General de Policía Turística de Jujuy, detuvo a un hombre que aparentemente pretendía cruzar con documentación falsa hacia Bolivia junto a una bebé de un año y medio que había sido secuestrada en Buenos Aires.

El hecho ocurrió el viernes pasado, cuando los efectivos de seguridad, alertados sobre la desaparición de la menor, iniciaron un intenso operativo de rastreo que terminó con la captura del sospechoso, a quien identificaron gracias a la descripción que había hecho la madre de la pequeña niña.

De acuerdo con lo que explicó Pablo Silveti, jefe de prensa de la Policía de Jujuy, cuando fueron notificados del rapto “se realizaron las actuaciones correspondientes” y se activaron las alertas en la zona, ya que estaba la versión de un posible arribo del acusado a la ciudad de Libertador general San Martín, en el departamento de Ledesma.

“Allí se abocó gran cantidad de personal policial con esta mira de encontrar al responsable de la sustracción de esta menor. Fortuitamente, siendo las 16:45 del viernes pasado, en la parte posterior de la terminal de ómnibus de esa localidad, los agentes hallaron a este sujeto”, explicó.

Según relató Silveti, esta persona tenía actitudes “bastantes particulares, parecía nervioso, y al ser consultado sobre su presencia en el lugar, en primer lugar dijo ser familiar de la bebé”, pero al solicitársele la documentación pertinente, los uniformados pudieron comprobar que “no se trataba de quien aseguraba ser”.

“Es por eso que se le dio intervención inmediata a la fiscalía ordinaria de la provincia de Jujuy, por supuesto también a la policía provincial y a las autoridades de la unidad regional”, precisó el funcionario en diálogo con el canal TN.

En este sentido, Siveti remarcó que “esta persona no guarda ninguna filiación respecto a esta menor, es alguien totalmente ajeno a esta niña” y que en Buenos Aires existe una denuncia de secuestro realizada por la madre de la pequeña.

“Se maneja la hipótesis de que el sospechoso habría tenido una relación sentimental con esta mujer, pero no se descarta ningún tipo de hipótesis en el marco de la investigación que se está realizando”, detalló el funcionario.

Además, indicó que el presunto captor “habría tenido la clara intención de pasar a territorio boliviano, seguramente por pasos no permitidos o que se encuentran inhabilitados”.

Asimismo, destacó que la madre de la bebé “ya se encuentra en Jujuy y pudo reencontrarse y hacerse cargo de su hija”, mientras que el sospechoso, de 26 años y de nacionalidad boliviana, quedó a disposición de la Justicia.

“Es de índole público que a nivel nacional han ocurrido este tipo de actuaciones. La provincia se encuentra geográficamente en el límite con la vecina nación de Bolivia. En este caso puntual la Policía ha tenido que actuar en la zona norte, en La Quiaca, puesto que años atrás se ha logrado detectar a personas que hacían estas actividades”, comentó.

Según el último informe mensual difundido por la Unidad Fiscal Especializada en Secuestros Extorsivos (UFESE), en enero de este año hubo cinco delitos de esta índole, uno solo en febrero, tres en marzo, en abril no hubo ningún caso –algo que sucedió por primera vez desde 2015-, en mayo tres, en junio otros tres, en julio cuatro y agosto uno más. Por lo que hasta ese momento sumaban 20 denuncias en lo que iba del año.